¿CÓMO HACER QUE TUS NEUMÁTICOS SEAN MÁS DURADEROS?

Los neumáticos son uno de los elementos más importantes de nuestro vehículo. Por eso es tan importante cuidar de ellos y mantenerlos en su estado adecuado.

Factores como el calor, el frío y, especialmente el continuo desgaste, ejercen una gran presión sobre los neumáticos. Con los años, los neumáticos van perdido cada vez más adherencia. Además, el efecto de frenado es peor cuando el asfalto está mojado y la resistencia a la rodadura en la nieve también es peor.

Por lo tanto, todo conductor debe conocer una serie de consejos para prolongar la vida útil de los neumáticos. No olvidemos que la profundidad del dibujo en estos elementos no debe ser inferior a 1,6 mm.).

Independientemente del kilometraje y las condiciones de la banda de rodadura, los neumáticos tienden a perder su rendimiento en los 6 años posteriores a su producción.

Sin embargo, respecto al desgaste por su uso, nos duren más manteniéndose en perfectas condiciones.

Consecuencias de la Presión Inadecuada de los Neumáticos del Coche

Presión de Neumáticos Baja

Cuando la presión de un neumático es demasiado baja o insuficiente, corremos el riesgo de que pueda explotar inesperadamente. Además, el peso del vehículo será mayor tanto en la llanta como en el borde de la banda de rodadura, lo que acabará consumiendo a los dos.

Por otro lado, si un volante está suelto dificultará que el conductor mueva el volante, por lo que impedirá que conduzca normalmente. Cuando los neumáticos no están presurizados, la resistencia de los neumáticos al asfalto aumenta. Este hecho, hace que cualquier tipo de maniobra con el coche se vuelva más difícil (frenado, giro del sistema de dirección, etc.).

Como consecuencia, aumenta la distancia necesaria de frenado y existe el riesgo de perder completamente el control del vehículo en situaciones de aquaplaning.

Presión de Neumáticos Alta

Conducir con la presión de los neumáticos demasiado alta puede volverse muy complicado debido a que, no tienen la suficiente adherencia al asfalto. Por lo tanto, conducir se vuelve muy peligroso y tal como sucede cuando la presión es demasiado baja, también en este caso podemos perder el control del coche.

Además, al igual que cualquier parte del coche, los neumáticos pueden sufrir daños irreparables, lo que requiere grandes gastos para reemplazarlos. Sin embargo, el peligro principal alude a la banda de rodadura y a que, con la distancia, tanto el neumático como la llanta se deformarán inevitablemente.

Algunos Consejos para el Cuidado de tus Neumáticos

Comprobar Regularmente la Presión de los Neumáticos

Recuerda que la presión de los neumáticos es importante y como tal, debe mantenerse siempre de acuerdo con las instrucciones del fabricante. Un neumático con una presión inferior a la recomendada puede provocar un desgaste prematuro, además de aumentar el riesgo de accidentes y/o averías.

Sin embargo, utilizar neumáticos con más presión de la necesaria también puede causarnos problemas. Por ello, es necesario comprobar con frecuencia la presión e identificar posibles fugas provocadas por un pinchazo. Esto es algo muy común y puede originar problemas al conducir.

Importante:

La presión de aire adecuada para los neumáticos de tu vehículo, la podrás encontrar en los documentos del mismo. Compruébalos regularmente y rellénalos siempre que sea necesario. De este modo, conseguirás reducir el desgaste de la banda de rodadura, así como el de las partes internas del neumático.

Como consejo, verifica visualmente las superficies de rodadura. Si ves objetos extraños como clavos o astillas en el neumático, retíralos cuidadosamente y comprueba que la llanta permanezca intacta.

Conduce Adecuadamente

El desgaste excesivo de los neumáticos también puede resultar de un estilo de conducción agresivo. Pues tanto aceleraciones sucesivas como frenadas bruscas pueden provocar un desgaste prematuro de la banda de rodadura.

Una buena forma de evitar el frenado repentino es practicar la conducción defensiva y anticiparnos a posibles peligros, semáforos, señalizaciones, etc.

Otro aspecto que debemos considerar son los cambios de velocidad. Es imprescindible ser cuidadoso y reducir la velocidad lentamente. Esto hará que el neumático se comprima tanto como sea posible a velocidades más altas.

En definitiva, es importante conducir de una manera sostenible y responsable y que evitemos un estilo de conducción agresiva. De esta forma, la goma se verá menos deteriorada y será posible aumentar la vida útil de las ruedas de nuestro vehículo.

Coge Bien las Curvas

Realizar una curva de forma imprudente o deportiva empuja el neumático al límite haciendo que el exterior de la banda de rodadura sufra especialmente. Esto da como resultado un desgaste irregular que suele reducir la vida útil del neumático. Por eso, en estos casos lo mejor es frenar antes de las curvas y mantener una conducción suave en ellas.

Controla la Velocidad al Conducir

Conducir a una velocidad superior a la estipulada por la ley, no solo supone un riesgo para la seguridad y de recibir multas, sino que también conlleva un calentamiento de los neumáticos más allá de lo normal. Esto, como ya hemos mencionado anteriormente, es altamente perjudicial para que nuestros neumáticos consigan alcanzar su máximo de vida útil.

Cuidado con los Baches

De nada servirán las medidas adoptadas para el cuidado de nuestros neumáticos si de repente nos encontramos con un bache con cierta profundidad que deforme la goma y ocasione un pinchazo o reventón del neumático.

Por lo tanto, siempre que podamos evitarlos o pasar sobre ellos a una velocidad menor, nos ahorraremos el problema de tener que repararlos.

Deja tu Coche Bien Estacionado

Si eres de los que tienden a dar con los bordillos mientras que aparca el coche, debes saber que son muchos los neumáticos que también se estropean de esta manera.

Así mismo, debemos considerar si en el lugar donde vayamos a estacionar hay algo sobre el asfalto que pudiera dañar nuestros neumáticos, como pueden ser cristales, piedras u otros.

Alineación de los Ejes

Los ejes deben estar alineados correctamente para que las ruedas tengan el contacto adecuado con el asfalto. Si la dirección vibra, puede que sea por causa de los ejes. Por eso, el simple hecho de revisarlos puede evitarnos muchos problemas y permitir que tengamos una conducción más cómoda y segura.

Guarda Correctamente los Neumáticos

Tanto si son de invierno como de verano, deben almacenarse en un lugar oscuro, seco y fresco. Recuerda que no les debe dar la luz solar, ya que esto nos garantiza que se mantengan flexibles y libre de grietas.

En cuanto a los neumáticos sin llantas deben guardarse colgados o de pie. Ahora bien, cuando las ruedas están completas también pueden ser almacenadas encostadas de lado.

¿Sabías que…?

El número DOT nos indica el tiempo que han estado en uso los neumáticos. Se trata de cuatro dígitos que encontraremos en la pared lateral del neumático. Estos números nos informan sobre la fecha exacta de fabricación del producto.

Para su interpretación, es necesario saber que, los dos primeros dígitos corresponden a la semana del calendario y los dos últimos al año. Es decir, si en tu neumático apareciera “1218”, significa que fueron fabricados en la semana 12 del año 2018.

Gracias a estos consejos conseguirás que los neumáticos de tu coche permanezcan en buenas condiciones durante un largo período de tiempo. De esta manera, siempre te sentirás más cómodo y seguro al volante.